Un grupo de profesionales de Servicio de Atención Domiciliaria (SAD) se han unido para conformar la Coordinadora de Trabajadoras SAD del País Valencià, una iniciativa sin precedentes en el territorio que, acompañada por nuestro sindicato, persigue acabar con la precariedad de este sector. Así, la valenciana deja de ser la única comunidad autónoma del Estado español sin una plataforma similar.
Entre las reivindicaciones de la coordinadora destaca la presencia en las mesas de negociación de convenios para que no se aprueben condiciones que no son consensuadas con las propias trabajadoras y que no responden a su realidad laboral. “Nos tienen esclavizadas”, afirma Amparo Faus Ortola, portavoz de esta nueva entidad.
Siguiendo con las palabras de nuestra compañera: “Cobramos, aproximadamente, 4,50 euros por hora en 14 pagas, pero no se tienen en cuenta los desplazamientos que, además, realizamos con medios propios. Esto significa que vamos hasta una población, allí hacemos una hora de atención en domicilio, luego nos movemos hasta otra localidad para realizar otra hora de atención y se nos remuneran 9 euros correspondientes a dos horas, aunque hemos invertido mucho más tiempo y recursos”.
Las trabajadoras SAD acusan, por tato, que la media de sus salarios no supera los 600 euros mensuales en jornadas que comprenden horas por la mañana y por la tarde, lo cual incumple la legislación sobre trabajo a tiempo parcial y, además, les impide optar a un segundo empleo para completar sus ingresos.
Por su parte, otra de las principales denuncias de las trabajadoras SAD es la falta de material para trabajar y de protección. “Nadie evalúa los riesgos de los domicilios donde trabajamos y en los que encontramos a personas con enfermedades mentales o infecciosas. De hecho, tenemos casos como el de una compañera que se infectó de tuberculosis en un domicilio, porque no la avisaron de la situación sanitaria ni le facilitaron protección, y ha quedado inmunodeprimida de por vida”, relata Amparo Faus Ortola.
A ello se suman demandas como el reconocimiento de enfermedades laborales, dado que muchas profesionales desarrollan el síndrome del túnel carpiano y dolencias en la columna vertebral; adelantar la edad de jubilación por el desgaste físico y psicológico que implica su trabajo y, en definitiva, la equiparación en derechos al resto del personal sanitario. “Somos personal geriátrico de residencias que se traslada para que las personas usuarias mantengan su bienestar y su autonomía en el domicilio. Es decir: somos profesionales sociosanitarias”, matiza la portavoz de la Coordinadora de Trabajadoras SAD.
Con todo, las trabajadoras SAD valencianas ya han establecido relaciones con plataformas similares de todo el Estado español y participarán en la manifestación que se ha organizado en Madrid para el próximo sábado 26 de noviembre, cuando las profesionales del sector pedirán, entre otras cuestiones, la redacción de un nuevo convenio estatal.
La Coordinadora SAD del País Valencià de la CNT se organiza de manera asamblearia y permanece abierta a incorporaciones de cualquier parte de las tres provincias. Las personas interesadas pueden dirigirse a coordinadora.sad@valencia.cnt.es. La afiliación es totalmente confidencial para las trabajadoras que deseen organizarse y asesorarse.
