Sindicalismo de Ruptura como alternativa al Sindicalismo de Copago

El coste añadido al valor de un servicio previamente cubierto mediante impuestos se conoce como copago.

El sinSindicalismo-De-Rupturadicalismo de concertación ha estado sobradamente pagado con nuestros impuestos, de tal suerte que, lamentablemente, padecemos un sindicalismo pactista mayoritariocapitalista, gubernamental y fictício por cuanto que subvencionado.

El copago sindical perjudica el sindicalismo efectivo en situaciones crónicas de escasez, bajos ingresos, pensiones reducidas y salarios cada vez más bajos, ya que a mayor debilidad obrera, mayores opciones de pacto para los sindicatos de concertación y con ello, mayor representitividad y mayor adjudicación de presupuesto estatal.

Somos la clase obrera quienes pagamos ese sindicalismo decadente reduciendo con ello nuestra defensa, nuestros ingresos y nuestro poder decisorio por coerción económica, ya que, además de costear con nuestros impuestos los gastos de supervivencia de ese sindicalismo inviable – estemos o no afiliados/as a estos sindicatos – la afiliación a los mismos implica aportar una cuota adicional mensual que no es otra cosa que un vergonzoso copago sindical encubierto.

El Estado impulsa interesadamente la financiación sindical que cada trabajador/a debe repagar en caso de requerir de sus servicios sindicales, permitiendo que los sindicatos de copago – para mayor decadencia del sindicalismo pactista que no se conforma con el monto institucional – concursen, se alíen o compitan entre ellos, a fin de revendernos unos servicios ya pagados.

La financiación institucional de cualquier sindicato pactista pervierte el sindicalismo convirtiéndolo en un mero instrumento estatal para controlar y frenar el verdadero movimiento obrero, haciéndolo en forma de pago por servicios prestados con la finalidad de contener a la clase trabajadora.

Si el Estado paga el total de servicios a prestar por los sindicatos tradicionales, y éstos, además, cobran a su afiliación una cuota mensual inferior a una milésima parte del total recaudado, cabe preguntarse – no sin razón – a quién o a quiénes obedecen y defienden.

Para abreviar:

#StopCopagoSindical

 

Federación Local de Valencia
Confederación Nacional del Trabajo (CNT)